lunes, 14 de enero de 2013

Capítulo 7.


Me levanté de un salto de aquella cama. Las ocho y media de la mañana. ¡Se me habían pegado las sábanas! Ahora no me daría tiempo a arreglarme y todo. Debería incluso desayunar engullendo.

-Enana, te buscan. – La voz de mi hermano Liam me alertó aún más.
-¿Quién? –A penas me había incorporado de la cama.
-Creo que tu profe.

Instantáneamente cerró la puerta y yo me levanté corriendo de la cama. La coloqué un poco por encima y empecé a rebuscar en los armarios. Perfecto, no encontraba nada que ponerme, ¡y aún quedaba vestirme! 

Al final me decidí por unos pantalones cortos de medio chándal y una camiseta de manga corta algo ancha. 
Comencé a cambiarme lo más rápido que pude para no hacer esperar más a aquel rubito.

-¿Se puede? – Dos toquecitos en la puerta me alertaron. ¡Yo estaba en sujetador!
-No, ¡no se puede! – Me tapé instantáneamente con la camiseta, pero creo que fue tarde.
-Oh, Dios mío, lo siento. Yo… - Aquel rubito se tapaba la mitad de la cara con los libros mientras desviaba su mirada hacia el suelo. Yo me di automáticamente la vuelta para que el no pudiese ver nada.
-¡Aprende a llamar! – Le dije entre sonrisas.
-Pensé que… bueno… jamás hubiera imaginado encontrarte así… -Dijo.
 Niall estaba ruborizado. Parecía realmente avergonzado de lo que acababa de hacer. Dos segundos más tarde, la silueta femenina de mi hermana, posaba un pie suyo en la entrada de mi cuarto.
-¿Qué os pasa? – Anne hizo un intento de risa mientras arrugaba el entrecejo.
-Nada, ¿qué va a pasar? – Dijo.
-Bien, bueno. – Anne sonrió. – Me voy a trabajar ya. Este trabajo es una monada. Además, hay gente maravillosa.

Acto seguido, Anne se agarró del cuello de Niall y juntó su nariz con la de él. Mi mirada no podía ir a otro sitio que no fuese la pareja acaramelada formada por mi hermana y por… ‘mi cuñado’. Después de ese apoyo de narices, llegó lo más temido: El beso. Ese chasquido de labios que hizo que mi corazón y mi estómago se juntasen creando un juego de sentimientos increíblemente fuerte. Mis latidos se apresuraban y mi respiración se aceleraba. Mi rabia parecía arder por las arterias de todo mi cuerpo mientras mi cabeza intentaba calmarme.

Al fin, después de ese eterno beso, Anne me miró, me sonrió y abandonó aquella sala. Mi cara de atontada continuaba dibujada en mi rostro. Atontada y perdida.

En ese justo momento, Niall me miró y me insinuó que deberíamos de empezar. Yo, simplemente me sacudí aquel moño que decoraba mi pelo y me acerqué a él. No quisimos comentar ninguno de los dos nada de lo que había pasado anoche, y tampoco de la escena que acabábamos de vivir.

Niall sacó como el día anterior su calculadora y sus libros, algún taco de folios y bolis.

-Hoy continuaremos con algo de álgebra. – Me informó.
-Perfecto. – Le sonreí.

Algo me cortó cuando vi que el de nuevo me miraba y se extrañaba. Parecía que la mirada de complicidad que teníamos ayer por la noche, había desaparecido, no existía. No existía aquel Niall amable de nuevo. Sus ojos de nuevos estaban apagados y su rostro solo mostraba seriedad.

Solo se escuchaba como la vez anterior las agujas del reloj en toda la habitación, sólo eso hasta que su voz comenzó a retumbar en las paredes.

-¿Estudiaste algo? – Me preguntó. Yo levanté medianamente la cabeza y le miré de reojo.
-¿Te soy sincera? – Le solté una sonrisa.
-Debes. – Su seriedad hizo que mi sonrisa desapareciese.
-¿Qué te ocurre? – Esa pregunta salió sola de mi boca. La había pensado pero jamás pensé en llevarla a cabo. –Mierda. – Susurré al darme cuenta de lo que acababa de soltar.
-¿A mí? – Él pestañeó un par de veces, yo asentí con la cabeza.- ¿Qué me va a pasar?
-Ayer no eras así.
-Me pillaste en las horas amables.

Mi mirada era de desconcierto absoluto. Incluso recuerdo que la impotencia era tan grande que quería romper algo. Quizá a llorar.

- Esto me parece aburrido. Creo que ninguno de los dos vamos a ganar nada. Ni yo que apruebes, ni tu aprobar. – Añadió.

En ese momento, mis manos chocaron con la mesa y impulsaron la silla de ruedas del escritorio hacia atrás, todo esto bajo la atenta mirada de Niall.

-Vamos. – Le dije señalándole el espacio que había entre mi silla y la suya para permitirle el paso. – Levanta.
-¿Para qué? – Me preguntó.
-Tengo una idea.

Abrí la puerta de mi habitación sin intentar hacer mucho ruido y sin levantar sospecha a mi madre. Miré hacia atrás donde se encontraba Niall a dos centímetros de mí. Agité mi cabeza hacia la izquierda indicándole que el camino era para allá. Después puse mi dedo sobre mi boca intentándole decir que no hiciese demasiado ruido.

Los dos comenzamos a andar hacia la escalerilla de la boardilla. Despacio tiré de la cuerda que las bajaba.
-Vamos. – Le susurré.

Comenzamos a subir a aquella boardilla a la que hacía años que no subía. Como cinco. Desde que dejé de pintar la abandoné.

-¿Por qué me traes aquí? – Dijo Niall cuando ya le permití hablar.
-A los dos nos aburren las clases típicas de matemáticas. ¿Qué te parece si en vez de darlas con números las damos pintando?

Niall de nuevo arrugó el entrecejo en signo de no entender nada.

-Verás… -Comencé a explicarle. – Siempre me ha encantado pintar y mi madre de pequeña me amoldó esta boardilla para mis ratos de dibujo. Me tiraba horas, días incluso semanas haciendo cuadros. – Le expliqué mientras me acerqué a un gran sobre donde guardaba todas las láminas dibujadas. – Desde la muerte de mi abuela, jamás volví a subir aquí, solo una vez. Era ella quien me daba ideas y quien me acompañaba siempre que podía a que pintara.

Sacudí el enorme sobre para que las láminas saliesen libremente. En esos dibujos había pinturas de frutas, de ventanas, paisajes, instrumentos y unas manos.

-Guau… - Se asombró Niall. – Eres realmente buena.
-Esas manos son de mi abuela. – Le expliqué. – Fue el último dibujo que hice después de que muriese, la última vez que subí aquí, hasta ahora. Quería reflejar el recuerdo de esas maravillosas manos para siempre. El recuerdo de esas antiguas pero perfectas manos que ella tenía. Las que me enseñaron a dibujar.

Niall parecía no dar abasto con toda esa historia y su boca permanecía abierta. Incluso parecía emocionado.

-¿Qué te parece si damos las clases de matemáticas dibujando? – Le sugerí.
-¿Y cómo es eso? – Preguntó levantándose de aquel banquete.
Abrí aquel caballete donde hacía años apoyaba las láminas.
-No sé dibujar. – Confesó Niall.
-¿Quieres que te enseñe?

Niall me miró indeciso pero con una vaga sonrisa.

-¿Y si nos pillan? – Me dijo.
-Ven, no tengas miedo.

Niall se colocó en frente de la lámina en blanco. Yo, me dirigí a aquel baúl donde guardaba los colores más primarios. Los abrí y me sorprendí de que la mayoría aún siguiesen intactos, de algo serviría aquel baúl tan feo que me regaló mi tía en mi séptimo cumpleaños. Después, abrí la manta de las brochas y elegí las más sencillas para que los trazados de Niall no fuesen muy gruesos y no se asustase.

-Ten. – Me acerqué a él y le cedí la tabla donde le había puesto los colores primarios. – Explícamelo con colores. Dibuja las reglas más importantes en rojas, las secundarias en azul y las terciarias en amarillo.

Niall simplemente se limitó a sonreír. Aun que no lo admitiese, estaba segura de que le estaba pareciendo buena idea aparte de entretenida.

-Espera. – Le frené. – Así no se coge el pincel.

Posé mi mano en su brazo derecho arrastrándola hasta llegar a su muñeca. Me puse detrás de él para poderle guiar. Su mano se dejaba llevar por la mía mientras yo estaba envuelta en su perfecto aroma que desprendía su cuerpo.

Algo recorría mi estómago. Algo intenso. No sabía exactamente que era, pero algo que crecía y no parecía mantenerse quieto por mucho tiempo. Algo, que solo un rubito de ojos azules y de mofletes perfectos, podría crear en mí.

-¿_____? ¿Qué hacéis aquí? – Una voz detrás de nosotros retumbó. Solté inmediatamente el brazo de Niall y él dejó caer el pincel el cual manchó toda la moqueta que decoraba aquella boardilla. No tenía palabras, no sabía que decir. 



4 comentarios:

  1. Síguela pronto… y la de apparead me he quedado con la intriga!!

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  2. POR FAVOR sube el siguiente ya, que llevas mucho sin colgar :(

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  3. cuando vas a subir el siguiente , llevas un monton sin subir , porfavor sube ya ;(

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